Película: El crepúsculo de los dioses

¡Buenas tardes, queridos surcadores de letras! Hoy vengo a comentaros una película que todo amante del cine tiene que ver al menos una vez:

Título: El crepúsculo de los dioses

Director: Billy Wilder

Reparto: William Holden, Gloria Swanson, Erich Von Stroheim, Nancy Olson

Año: 1950

Puntuación: 9
Duración: 110 minutos

Argumento: Joe (William Holden) es un escritor de guiones cuyas obras son, en su mayoría, rechazadas. Esto hace que no tenga mucho dinero, por lo que no tardan en intentar quitarle el coche. Joe decide huir y, de repente, se encuentra en casa de Norma Desmond (Gloria Swanson), una antigua estrella del cine mudo. Ella le propone escribir un guion para una película protagonizada por ella misma. Él, receloso, decide aceptar. A partir de ahí, sucederá una serie de cosas que irán complicando la vida del protagonista y que desembocará en un final fatal.

Todo un clásico. El mismo director de Con faldas y a lo loco (1959), Bésame, tonto (1954) y Sabrina (1954), entre otras muchas, tendría que haber ganado el Óscar a Mejor Director por esta película (estuvo nominado). Eso sí, consiguió el Óscar a Mejor Argumento y Mejor Guion Adaptado. También ganó cuatro Globos de Oro, incluyendo Mejor Película. Tanto desde el punto de vista técnico como de la historia son muy atrayentes. Desde el primer momento, el espectador permanecerá en su asiento hasta los créditos finales, sin parpadear. Esta vez, vamos a empezar a comentar la historia, pues su relación con la parte técnica es muy estrecha.

La historia, como habréis leído arriba, trata de un guionista pobre que da con la casa de una antigua actriz muy famosa del cine mudo. A partir de ahí, ella le ofrece permanecer en su gran casa a cambio de que escriba un guion para una película hecha para ella, vamos. Al ofrece refugio (pues la policía le persigue) y mucho dinero, decide aceptar. ¡En qué hora lo hizo! No tarda en darse cuenta que la actriz está... loca. Sí, loca. No es consciente de que su buena etapa ya pasó, que el cine mudo se quedó atrás hace mucho... Y ella se obsesiona con el guionista, no permitiéndole que salga de la casa y amenazándole. El final es trágico. Y es que una de las cosas en las que destaca en la película es por su tratamiento del tiempo. Es aquí cuando hablamos de la parte técnica:

El final es lo primero que el espectador ve. Sí, es un spolier del spolier. Pero lo interesante es ver el motivo de ese final. Al inicio, es imposible empatizar con la persona que... acaba en la piscina, sin moverse (me entendéis, ¿no?). Por lo que toda la película es un flashback. Evidentemente, la película es en blanco y negro. Hay varios planos muy interesantes a lo largo de la película. Está narrada por el protagonista. El casting está muy bien seleccionado. La mujer interpreta de sobresaliente. Es toda una estrella del cine mudo. El protagonista también lo hace bastante bien, al igual que el mayordomo (quien, ya por su presencia, el espectador intuye que tiene un papel decisivo). En cuanto al sonido, entre que en el doblaje se pierde el sonido original y entre que es del año 50, no es muy destacable. Lo mejor, sin duda, es el tratamiento de la imagen y la interpretación de los actores (a nivel técnico; que la historia también está bastante bien).

En resumen, que si no la has visto, ¡no tardes más! Es una película muy entretenida, te mantiene en el asiento hasta el final. La interpretación es muy verosímil, lo que colabora a que la historia resulte creíble. 

Os deseo un feliz lunes.