sábado, 4 de octubre de 2014

Reseña: Crónicas de la Torre III. La llamada de los muertos

¡Buenos días! ¿Cómo van vuestras lecturas? Hoy os vengo con una nueva reseña.
Título: Crónicas de la Torre III. La llamada de los muertos
Autora: Laura Gallego
Encuadernación: tapa dura
PVP: 13'50
Páginas: 284
Editorial: SM
Argumento: Tras la llegada a la Torre de Saevin, un muchacho con unos poderes excepcionales, Dana siente que algo extraño está a punto de suceder y decide viajar a la Ciudad Olvidada para visitar el Templo Sin Nombre y consultar al Oráculo. La aterradora profecía que sale de su boca, y en la que se verán implicadas once personas, la inquieta todavía más. Pero, ¿existe alguien capaz de manipular los designios del destino?

¡Increíble! ¡Me ha encantado! Es un final apoteósico. Si bien siguen los años pasando con demasiada rapidez, los acontecimientos son más alucinantes y los personajes más maduros y complejos. Está claro que ha partir de ahora, la trilogía Crónicas de la Torre ha pasado a ser una de mis trilogías favoritas. Si bien no se puede comparar con, por ejemplo, Memorias de Idhún, Crónicas de la Torre es bastante digna. Es más sencilla sin alejarse de la gran imaginación que caracteriza a la autora. Como siempre, hay que tener en cuenta cualquier detalle, pues al final todo encaja. Un personaje que pensé que aparecería en más ocasiones fue Morderek. En esta última novela no aparece mucho. Solo en un momento concreto de la historia. Quizá la autora podría haber alargado esta novela unas cuantas páginas más para que se desarrollara más este personaje como villano. Otra cosa que me sorprendió fue la relación Jonás-Salamandra. No quiero desvelar mucho, solo que, bueno, tarda un poco... En general, no hay mucho romance, aunque es normal, pues solo aparecen Nawin, Salamandra, Gaya y Dana. No hay más mujeres. En cambio, hay muchos personajes masculinos, como Morderek, Jonás, Fenris, Kai, Conrado, Hugo... Cuando Dana va a ver al Oráculo para que le cuente qué sucederá cuando llegue el Momento es muy interesante. ¿Por qué? Pues porque le dice esto (más o menos, no me acuerdo mucho):  uno será traicionado; otro será tentado por el mal; otro partirá en un viaje peligroso, tal vez sin vuelta atrás; otro se consumirá en su propio fuego; otro escuchará la llamada de los muertos; otro, el más joven, entregará su aliento vital; otro recuperará su verdadero cuerpo; otro cumplirá su venganza; otro morirá en horribles sufrimientos; cuando llegue el Momento, otro abrirá la puerta y el último cruzará el Umbral para hacerse inmortal. A lo largo de la novela, los personajes van descartando al otro, coincidiendo con lo que piensa el lector. Pero nada es lo que parece, y el final de esta novela es fantásticamente retorcido. Y me encanta lo que ocurre en la última lámina del libro. Lo releí varias veces (y varias veces me preguntaron que qué hacía frente al espejo, totalmente quieta de espaldas).

Resumiendo, que los que no hayáis empezado esta trilogía, os animo a que la leáis. El final no tiene desperdicio. Laura Gallego sigue su misma línea. Aunque, como digo más arriba, no se puede comparar a Memorias de Idhún, esta trilogía es perfecta para pasar un buen rato. Los que la estáis leyendo actualmente, deciros que lo mejor está por ver.
Os deseo un feliz sábado.

2 comentarios:

  1. Buenas! pues me has picado la curiosidad, me leí el primero hace unos meses pero de momento no tenía pensado continuarla... pero ahora me apetece terminarla. besos

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    1. ¡Tienes que terminar esta trilogía! Te has quedado justo en lo mejor.
      Ya nos contarás!
      Besotes!!

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