Buenas noches, surcadores de letras. Sí, habéis leído bien. Se ha cancelado el concurso de La Investigación PSI (editorial Divalentis). Ha sido una noticia que me ha sorprendido. Es una pena, porque hubiera sido una experiencia genial. Hubiera sido un concurso muy dinámico, cuyos premios eran muy tentadores. ¿El motivo? Creo que lo mejor será que os pegue una nota que el autor de El azar no se llora, Alonso Barán, ha enviado a los blogs colaboradores:
Estimados amigos.
Como autor de la obra “El
Azar no se llora”, me
dirijo a vosotros para daros las debidas explicaciones por la repentina
cancelación de la Investigación PSI.
Lo primero que quiero es pedir
mis disculpas personales a los bloggers
colaboradores, a sus seguidores y a los lectores de sus blogs. Yo trabajé muy
duramente en hacer algo divertido que ha generado mucha expectación y entiendo
que la cancelación del proyecto ha traído decepción y confusión a mucha gente.
De verdad siento mucho que las expectativas creadas se hayan frustrado
repentinamente, os vuelvo a pedir disculpas por ello y, especialmente, por las molestias
que os haya podido causar esa cancelación por parte de la editorial.
Lo segundo que quiero es daros
una explicación de lo ocurrido, puesto que creo que es lo mínimo que os puedo
ofrecer y además es algo a lo que creo que tenéis derecho.
He esperado hasta hoy porque,
como imaginaréis, el golpe para mí ha sido tremendo y ha tenido graves
consecuencias en mi estado de ánimo. Por fin tengo fuerzas para hablar y por eso
lo hago ahora. Lo ocurrido de forma sintética es que, lamentablemente, el
director y editor de Divalentis Editorial (Sergio Guinot), canceló el día 22 de
octubre la Investigación PSI y me envió la «rescisión del contrato».
Entiendo que os preguntéis: ¿por
qué un editor iba a cancelar la promoción de un libro de su editorial y resolver
el contrato con el escritor? ¿Algo grave habrá ocurrido? La verdad yo todavía
me pregunto qué es lo que ha pasado. Y lo cierto es que no lo sé, pues los
motivos para que alguien haga algo así se me escapan. Lo siento, pero no
encuentro ninguna lógica racional. En esta situación la única explicación que
puedo daros es la exposición de los hechos, tal vez me podáis ayudar a entender
lo sucedido.
Para la promoción de la obra se
planteó la idea de hacer algo nuevo y divertido como era la Investigación PSI. En
ella trabajé con el editor, pero aunque trabajé muy duramente en el proyecto,
no tuve la necesaria colaboración por su parte. De hecho, le pedí
reiteradamente su colaboración y especialmente porque era necesario probar la
jugabilidad de la Investigación PSI, pero no lo conseguí debido a que, según me
decía, tenía más cosas que hacer en la editorial. El hecho es que la fecha del
inicio del concurso se acercaba y su colaboración era insuficiente para que la
Investigación PSI funcionase de forma óptima, razón por la que le solicitaba
que hiciera lo preciso para comprobar el correcto funcionamiento de la
jugabilidad.
Esa necesidad de su colaboración
en el terreno indicado se hizo más imperiosa al conseguir yo una reunión con
gente de Televisión Española para mostrarles la Investigación PSI, lo que me
daría la posibilidad de obtener una entrevista y un reportaje. Dicha reunión se
produciría el viernes 23 de octubre. Avisé al editor el miércoles 21 en cuanto
me confirmaron este hecho y le recalqué que era muy importante que estuviese probada
la jugabilidad de los acertijos.
El jueves 22 a media mañana le
llamé por teléfono con la esperanza de que me dijese que la jugabilidad del
primer capítulo estaba controlada y que el viernes tendría algo que mostrar a
la gente de TVE. Eso no ocurrió, pero sí ocurrió que, tras recordarle la
importancia de la reunión y que el domingo 18 habíamos acordado que la
jugabilidad del capítulo 1 estaría comprobada enseguida, canceló
unilateralmente la Investigación PSI y me rescindió el contrato en cuestión de
minutos.
Imaginad mi situación: todo el
trabajo que había realizado en la Investigación PSI tirado a la basura sin
ningún miramiento, EL AZAR NO SE LLORA se queda fuera del mercado (el trabajo
de años que lleva escribir un libro, conseguir una editorial, publicarlo y
promocionarlo han quedado en nada) y mi carrera como escritor está seriamente
dañada.
Siento que me han tratado como si
mi esfuerzo y mi dedicación a Divalentis Editorial no tuviesen ninguna importancia,
como si yo mismo no tuviese el menor valor y por eso mi trabajo y mi carrera pueden
tirarse a la basura en un santiamén y sin ninguna consideración.
Ahora mismo, me encuentro sin
editorial y con un proyecto destruido. Y todo porque he querido hacer algo
divertido en la blogosfera.
Supongo que os haréis cargo de
porqué las muestras de apoyo que he recibido estos días han sido tan
importantes para mí.
Gracias, muchas gracias por escucharme.
Alonso Barán.
Así que, sintiéndolo mucho, el concurso no se llevará a cabo. El autor avisó hace unos días pero, para bien o para mal, no he tenido ocasión hasta ahora (y, en realidad, me he obligado a escribiros esto ahora porque, teóricamente, el concurso empezaba mañana lunes 2 de noviembre).
Os deseo un feliz domingo.
Qué fuerte!! Bueno, le queda la auto publicación, no? Mejor eso que nada...
ResponderEliminarYa... Lo que pasa es que tampoco es fácil lo de la autopublicación... Además, en el mundo de los escritores, se miran mal a los que recurren a la autoedición, ya que no son considerados buenos escritores. Me parece injusto que se juzgue así a las personas que recurren a la autopublicación, pero es que es así...
EliminarGracias!!